viernes, 31 de marzo de 2017

LA CADENA TRANSPORTADORA DE ELECTRONES Y LA FOSFORILACIÓN OXIDATIVA


LA CADENA TRANSPORTADORA DE ELECTRONES Y LA FOSFORILACIÓN OXIDATIVA


Protones, electrones y oxidación-reducción

Protones, electrones y oxidación-reducción Los seres vivos consumen oxígeno y producen dióxido de carbono como parte de su metabolismo celular. Este hecho, que había demostrado Lavoisier, junto con el desarrollo de la enzimología a principios del siglo XX que demostró que las oxidaciones biológicas eran catalizadas mediante enzimas in- tracelulares, permitió descubrir que estas reacciones de transferencia electrónica aprovechan la energía libre producida para obtener energía química en forma de ATP, siendo estas reacciones la base de la obtención de energía a nivel celular.
En los sistemas vivos, los electrones involucrados en las oxidaciones celulares no pasan directamente al oxígeno, sino que se transfieren a través de diversas vías con múltiples etapas. Los electrones de las oxidaciones se emplean en una primera etapa para reducir el NAD+ y FAD a NADH + H+ y FADH2, respectivamente. Los electrones fijados en estas coenzimas pasan entonces a la cadena transportadora de electrones, gracias a la reoxidación mitocondrial del NADH + H+ y del FADH2 a NAD+ y FAD respectivamente. Los electrones sufren un proceso de oxidación-reducción secuencial a través de determinados centros rédox (complejos mitocondriales) para finalmente reducir el oxígeno a agua. Este proceso, por el cual se transfieren los electrones desde las biomoléculas del alimento hasta el oxígeno, suele denominarse respiración aerobia o respiración celular. En este proceso, una serie de protones se transfieren desde la matriz mitocondrial hacia el espacio inter- membrana de la mitocondria, de modo que se crea un gradiente de protones (gradiente electroquímico). Este gradiente resultante sirve para impulsar la síntesis de ATP, a partir de ADP y P¡, a través de la llamada fosforilación oxidativa.
La respiración celular (cadena transportadora de electrones) y la fosforilación oxidativa tienen lugar en las mitocondrias de los eucariotas, cuya membrana interna es impermeable a la mayoría de las pequeñas moléculas e iones, incluyendo los protones. En los procariotas, que carecen de mitocondrias, pueden realizar la respiración celular gracias a las proteínas de la cadena de transporte electrónico que se encuentran en la membrana plasmática.
Complejos y transporte electrónico
La mayoría de los electrones que se van a utilizar en la cadena transportadora de electrones provienen de la acción de las deshidrogenasas, que recogen los electrones de los distintos procesos catabólicos y los canalizan hacia los aceptores universales de electrones (principalmente NAD+ y FAD). Entonces los electrones fijados por estas coenzimas se transfieren a una serie de transportadores asociados a la membrana interna de la mitocondria conocidos como complejos (1). Estos complejos transportadores de electrones son de naturaleza proteica y poseen diversos grupos prostéticos capaces de aceptar y de donar electrones (2). En la cadena respiratoria intervienen tres tipos de moléculas capaces de transferir electrones. La ubiquinona o coenzima Q (una quinona hidrofóbica), los citocromos (proteínas que tienen como grupos prostéticos grupos hemo con hierro) y las proteínas con agrupaciones sulfo-férricas (centros Fe-S). El tránsito de electrones a través de los complejos se produce en orden creciente de afinidad electrónica, transfiriendo los electrones desde las coenzimas reducidas hasta el oxígeno, aceptor final de los electrones. Los complejos implicados en la transferencia de electrones son:
• El complejo I, también llamado NADH-ubiquinona oxidorreductasa o NADH deshidrogenasa, que transporta los electrones del NADH a la ubiquinona.
• El complejo II es la succinato deshidrogenasa, única enzima del ciclo de Krebs unida a membrana, que pasa los electrones del FADH2 a la ubiquinona.
 • El complejo III, también llamado citocromo bcj o complejo ubiquinona- citocromo c oxidorreductasa, que acopla la transferencia de electrones desde la ubiquinona al citocromo c.
• El complejo IV, también llamado citocromo c oxidasa, es la última etapa de la cadena de transporte electrónico de la respiración y conduce a los electrones desde el citocromo c hasta el último aceptor de los electrones, el oxígeno, que se reduce a agua.
Los electrones del NADH + H+ se transportan al complejo I, y allí son aceptados por el nucleótido de flavina FMN; posteriormente se transfieren a una serie de centros Fe-S, que, finalmente, trasladan los electrones a la ubiquinona. El paso de los dos electrones del NADH + H+ por el complejo I permite el tránsito de un total de cuatro protones al espacio intermembrana. La ubiquinona reducida difunde libremente por la membrana transportando los electrones hasta el complejo III; en este complejo los electrones se transfieren de uno en uno a través de un proceso complejo de varios pasos. El hecho de que los electrones pasen individualmente hace que se genere ubisemiquinona (molécula de ubiquinona reducida por un solo electrón) que, gracias a los citocromos b del complejo II, se reduce nuevamente y cede el segundo electrón. Al final, los dos electrones son cedidos a dos citocromos c (cada citocromo c transporta un electrón): durante este proceso se logran transportar otros cuatro protones al espacio inter- membrana. Los citocromos c se encargan de transferir los electrones desde el complejo III al complejo IV. Dicho complejo IV es el responsable de reducir una molécula de oxigeno a agua, proceso para el cual necesita cuatro electrones y en el que es importante la presencia de varios citocromos a y de dos átomos de cobre que colaboran en la reducción de la molécula de oxigeno. El citocromo IV, al transferir los cuatro electrones al oxígeno, logra transportar cuatro protones hacia el espacio intermembrana; si bien, como el NADH + H+ cedió solo dos electrones por cada molécula, el complejo IV únicamente transfiere dos protones, lo cual supone un total de diez protones por molécula de NADH + H+ reoxidada a NAD+. La principal fuente de NADH + H+ son los diversos pasos del ciclo de Krebs estudiados en el apartado anterior.
 Los electrones de las moléculas de FADH2 entran en la cadena transportadora de electrones a través del complejo II (complejo succinato deshidrogenasa del ciclo de Krebs) que transfiere los electrones a la ubiquinona. Otras enzimas como la acil CoA deshidrogenasa también transfieren los electrones del FADH2 a la ubiquinona, aunque estos procesos no logran trasladar ningún protón al espacio intermembrana. A partir de la ubiquinona, los electrones del FADH2 siguen el mismo camino que los electrones del NADH + H+, siendo transferidos al complejo III, al citocromo c, al complejo IV y, finalmente, cedidos al oxígeno formándose agua. El trasiego de los electrones procedentes del FADH2 permite el paso de un total de seis protones por molécula al espacio intermembrana. La utilización de la cadena transportadora de electrones y del oxígeno implica una serie de riesgos para la célula; estos riesgos son consecuencia de la capacidad oxidante del oxígeno y de la formación de radicales libres que pueden originar daño oxidativo a las biomoléculas 



jueves, 30 de marzo de 2017

EL METABOLISMO DE HIDRATOS DE CARBONO


EL METABOLISMO DE HIDRATOS DE CARBONO 



El metabolismo de hidratos de carbono es una de las principales rutas de metabolismo celular .entre los azucares utilizados como gran fuente de energía para la célula destaca principalmente la glucosa ya que es la base de muchos polisacáridos la glucosa ocupa un papel muy funcional y central en el metabolismo de los hidratos de carbono
También conoceremos las principales rutas metabólicas presentes en el organismo que se van a relacionar estrechamente con la producción de energía y de poder reductor ya que la energía que se utiliza generalmente proviene del metabolismo de los azucares como la glucosa.
Las rutas relacionadas con el glucógeno polisacárido de reserva energética de síntesis más rápida o a corto plazo es la de los animales. Es importante conservar un buen estatus energético en el organismo especialmente en músculos e hígado
La glogenolisis comprende la reacción de degradación mientras que la gluconeogénesis incluye la vía de síntesis a partir de la glucosa.
De las ruta relacionada con los monosacáridos  tenemos como principal la ruta catabólica llamada glucolisis ruta degradativa  de la glucosa que sirve para la obtener energía de esta molécula y también de otras hexosas y monosacáridos
La glucogénesis es la principal ruta anabólica que sintetiza glucosa a partir de intermediarios metabólicos como intermediario metabólico tendremos al piruvato que participa como vías de entrada en las rutas catabólicas de fermentaciones
El  análisis y las comprensión de este conjunto de rutas complementara el estudio  digestivo de los hidratos de carbono ya que en el caso de los  humanos animales y organismos organotrofos, la indigesta de azucares, polisacáridos constituye principalmente la fuente de hidratos de carbono. Aunque esto organismos pueden sintetizar azucares a partir de moléculas intermediarias.

LA DIGESTIÓN DE LOS AZUCARES EN LA DIETA
Todos los organismos superiores cuentan con un sistema especializado para realizar la digestión de los diferentes componentes de los alimentos. En el caso de los carbohidratos, el problema es relativamente sencillo, puesto que la variedad de las moléculas que se ingieren no es muy grande. En su mayor parte estas son almido­nes, dextrinas (y glucógeno en pequeña proporción), sacarosa y galactosa. Desde el punto de vista de la digestión el problema de los organismos se reduce a convertir estas moléculas en los monosacáridos que las componen.

Digestión del almidón

En teoría, en los animales superiores la digestión del almidón se inicia en la boca. La saliva, principalmente aquella producida por la parótida, contiene una enzima, la amilasa salival, llamada también ptialina. Esta es capaz de actuar sobre los almidones y sobre el glucógeno, rompiendo los enlaces alfa-1,4 de tal forma que se separan de dos en dos los fragmentos de la molécula polimérica. Las moléculas que resultan entonces, son del disacárido maltosa. Pero la acción de la amilasa salival es de corta duración; el bolo alimenticio permanece en la boca durante el tiempo de la masticación y luego es deglutido. En el estómago, el HCl del jugo gástrico le con­fiere un carácter ácido, con un pH cercano a 2. El pH óptimo de la amilasa salival se encuentra cercano a 7, por lo cual una vez llegado el bolo alimenticio al estómago se suspende la acción de la enzima. Lógicamente el efecto logrado por ésta no es muy importante, de manera que desde el punto de vista práctico la digestión de los carbohidratos por la acción de la saliva es nula. En realidad, la digestión de los almidones se inicia en el intestino delgado por la acción de la amilasa pancreática, enzima que tiene el mismo mecanismo que la amilasa salival, es decir que el almidón se va convirtiendo en maltosa. Además hay otra enzima, la amilo-1,6-glucosidasa, que se encarga de romper los enlaces alfa-1,6 de manera que la acción combinada de ésta y de la amilasa da como resultado la conversión total del almidón en moléculas de maltosa. Luego la maltosa es objeto de la acción de diferentes tipos de maltasas, producidas por el intestino, que realizan la degradación completa de la molécula para convertirla exclusivamente en glucosa.

Digestión de otros azúcares

Para la digestión de los disacáridos hay sendas enzimas producidas por la mucosa intestinal, que los reducen a sus componentes: la sacarasa convierte a la sacarosa en glucosa y fructosa; la lactasa convierte a la lactosa en glucosa y galactosa. El final del proceso digestivo es una mezcla de glucosa, galactosa y fructosa en la cual pre-domina, desde luego la primera. En la figura 9.1 se presenta en forma esquemática el proceso digestivo de los carbohidratos. En los humanos se pueden presentar alteraciones congénitas en la síntesis de algunas de las enzimas digestivas de los carbohidratos. En algunos casos falta la saca- rasa; con mucha mayor frecuencia ocurren casos de ausencia de la lactasa, que desde luego es mucho más seria que la de la primera. Sin embargo, hay que señalar que son raros los casos de estas deficiencias enzimáticas.

Factores que intervienen en la digestión de los carbohidratos.

Boca: Amilasa salival: Almidón — Maltosa
Páncreas: Amilasa pancreática: Almidón — Maltosa
Intestino: Maltasas: Maltosa — Glucosa
Sacarasa: Sacarosa — Glucosa + Fructosa
Lactasa: Lactosa — Glucosa + Galactosa

ABSORCIÓN DE LOS MONOSACÁRIDOS RESULTANTES

Una vez digeridos los carbohidratos, el intestino tiene que introducir las moléculas resultantes en el organismo. Con este objetivo, dispone de sistemas de transporte específicos para los azúcares, que además requieren de la participación de los sistemas energéticos para funcionar. No está claro aún cuál es el mecanismo mole-cular por el que los azúcares cruzan la pared intestinal. Se sabe que el sistema de transporte es específico y depende de una fuente de energía, la cual a su vez tiene su origen en el metabolismo de las células de la pared intestinal, y finalmente, pare-ce haber una cierta relación entre el transporte de los azúcares y el del sodio. De cualquier manera, el hecho es que los monosacáridos resultantes de la digestión de los carbohidratos son absorbidos por la pared intestinal, y aparecen luego en el torrente circulatorio de la vena porta, que los lleva a todo el organismo, pasando primero por el hígado, para su distribución general.

GLUCÓLISIS

La glucólisis es una vía que permite obtener ATP a las células.
La glucólisis (o glicólisis) es una vía catabólica a través de la cual tanto las células de los animales como vegetales, hongos y bacterias oxidan diferentes moléculas de glúcidos y obtienen energía. El hecho de que esta vía ocurra en organismos muy diversos, indica que es una vía metabólica conservada, es decir presente en organismos filogenéticamente distantes.
 •Para su estudio, describiremos 9 reacciones enzimáticas que ocurren en el citoplasma y permiten la transformación de una molécula de glucosa a dos moléculas de piruvato.  La degradación hasta piruvato es parte del proceso catabólico o degradativo de los glúcidos, porque estas moléculas pueden seguir oxidándose y continuar entregando energía a la célula.
Esquema de la Glucólisis. Se representan los principales intermediarios, su número de carbonos (C) y las fases de consumo y producción de ATP (primera y segunda fase respectivamente)
El balance neto para la reacción global de la glucólisis es:
 Hexosa + 2 NAD+ + 2 ADP + 2 Pi  2 NADH + 2 piruvato + 2 ATP
En la glucólisis se pueden establecer dos fases
Primera fase = Activación de la hexosa (glucosa por ej.), con gasto de energía como ATP.
Segunda fase = Obtención de energía que se conserva como ATP.
• La primera fase es endergónica, porque se consumen 2 ATP, y consta en la transformación de una hexosa (por ejemplo, glucosa) en dos triosas (dihidroxicetona 3 P y gliceraldehído 3P). La segunda fase es exergónica, dado que se forman 4 ATP utilizando la energía liberada de la conversión de 2 gliceraldehídos 3P en 2 piruvatos .
• La glucólisis ocurre a través de reacciones enzimáticas, donde cada enzima cataliza una reacción o paso específico. De esta forma, cuando se hace referencia a una isomerasa, lo es a una específica para determinada molécula, y no a una isomerasa universal que catalice cualquier reacción de isomerización. Lo mismo sucede con las quinasas, deshidrogenasas, etc.

Una vision panoramica de la glucolisis

Visualizar el conjunto de reacciones que conforma a la glucólisis, previo a la descripción de cada reacción, ayuda a tener una idea general sobre lo que incluye esta vía, que transcurre en el citoplasma. En la figura 2 se observa, al igual que en la figura 1, la etapa de inversión de energía y la de síntesis de ATP, así como a partir de una hexosa, en este caso la Glucosa, se obtienen dos moléculas de piruvato, de 3C cada una.

Encontramos un esquema general con la secuencia de reacciones que incluye la glucólisis. GA3P, gliceraldehído 3-P;
D3P, dihidroxicetona 3-P. Se numeran las reacciones tal cual están descriptas en el texto.
La fase de gasto de energia va desde una hexosa no fosforilada hasta el GA3P y D3P.

REACCIONES DE LA GLUCOLISIS

Reacción 1

La glucosa, se fosforila y rinde glucosa 6P (G6P), una molécula con mayor energía. La enzima responsable de la reacción, una quinasa (hexoquinasa) consume una molécula de ATP y libera ADP. La misma hexoquinasa fosforila otras hexosas como fructuosa, galactosa y manosa.
Es irreversible, es decir la los productos (G6P y ADP) no liberan los reactivos (Glucosa y ATP).

La fosforilación de la glucosa tiene ventajas para la célula: la G6P es más reactiva que la glucosa y a diferencia de ésta no atraviesa la membrana celular porque no tiene transportador. De esta forma se evita la pérdida de un sustrato energético para la célula.

Reacción 2

La G6P se isomerisa a fructosa-6-fosfato (F6P) por acción de una isomerasa, que facilita la isomerización de estas hexosas en los dos sentidos: de F6P a G6P o de F6P a G6P, la reacción es reversible.

Reacción 3

Consiste en la fosforilación de la F6P en el C1, que rinde fructosa 1,6-bifosfato (F1-6P). En esta reacción, catalizada por otra quinasa, la fosfofructoquinasa (FFQ), se consume ATP. Esta enzima merece especial atención porque, como se mencionará más adelante, participa en la regulación de la glucólisis.
Esta reacción, al igual que la primera, es irreversible, y ambas constituyen pasos importantes porque son los puntos de control de la glucólisis.

Reacción 4

En esta reacción la F1-6P se rompe en 2 moléculas de 3 carbonos (triosas): la dihidroxiacetona 3-fosfato (D3P) y gliceraldehído 3-fosfato (GA3P) mediante una reacción reversible catalizada por una liasa (aldolasa).

Reacción 5

El GA3P sigue los pasos de la glucólisis, la otra triosa generada, D3P, por isomerización produce otra molécula de GA3P. La reacción es reversible, y está catalizada por una isomerasa.

Éste es el último paso de la Fase con gasto de energía en la que se consumieron 2 ATP.
Así, en el cuarto paso se genera una molécula de GA3P, y en el quinto paso se genera la segunda molécula de éste. De aquí en adelante, las reacciones ocurrirán dos veces, debido a que se generan dos moléculas de GA3P por hexosa.
Hasta el momento solo se han consumido 2ATP, sin embargo, en la segunda etapa, el GA3P se transforma en una molécula de alta energía, a partir de la cual se obtendrá el beneficio final de 4 moléculas de ATP.

Fase de obtención de energía

Reacción 6

Consiste en la oxidación del GA3P e incorporación de un fosfato a la molécula, de manera que se genera un compuesto con mayor energía. En este paso, que en realidad implica dos reacciones, actúa una deshidrogenasa que utiliza NAD+ y se genera NADH.H. Se verá al finalizar la descripción de la vía, cómo y por qué es necesario reoxidar este cofactor.

Reacción 7

En este paso el grupo fosfato del 1,3-bifosfoglicerato se transfiere a una molécula de ADP, por una quinasa, generando así la primera molécula de ATP de la vía. Esta manera de obtener ATP, en la que no participa la cadena respiratoria, se denomina fosforilación a nivel de sustrato.
Como la glucosa se transformó en 2 moléculas de GA3P se sintetizan un total de 2 ATP en este paso.
Las reacciones 6 y 7 de la glucólisis corresponden a un caso de acoplamiento, donde una reacción energéticamente desfavorable (6) es seguida por una reacción muy favorable energéticamente (7) que induce a que ocurra la primera (figura 2).

Reacción 8

Consideramos aquí a dos reacciones sucesivas, de las cuales una, la isomerización del 3-fosfoglicerato a 2-fosfoglicerato, no aparece representada en la figura 2 y la otra corresponde a la transformación del 2- fosfoglicerato en fosfoenolpiruvato (PEP), por acción de la enolasa.
2-Fosfoglicerato - PEP + H2O

Reacción 9

En la última reacción, irreversible, se desfosforila el PEP y se obtiene piruvato y ATP. La transferencia del grupo fosfato del PEP al ADP la cataliza una quinasa (piruvato quinasa). Es la segunda fosforilación a nivel de sustrato: se fosforila el ADP a ATP independientemente de la cadena respiratoria.
Como se observa, el oxígeno no es necesario en ninguna reacción de la glucólisis; la vía ocurre en células aerobias y fermentativas.

LA REGULACIÓN DE LA GLUCÓLISIS

En la ruta glucolítica existen tres puntos importantes de control .El primero es aquel en que la glucosa se fosforila a glucosa 6-fosfato por ATP y la hexoquinasa. Otro importante punto de control es la reacción catalizada por la fosfofructoquinasa. Esta enzima reguladora es activada por AMP y ADP e inhibida por ATP y citrato. El tercer punto de regulación es la reacción catalizada por la Piruvato quinasa, que es activada por fructosa 1,6-bisfosfato y AME Como se puede observar, las tres enzimas de control están reguladas por un intermediario metabólico, pero de una manera especial por la concentración de AME ADP y ATE. De una manera simplificada se puede afirmar que la relación ADP/ATP regula el flujo metabólico de la ruta. Si esta relación es alta porque la concentración de ATP es baja, la glucólisis se activa para formar ATP. Si, por el contrario, la relación ADP/ATP es baja, la célula inhibe la fosfofructoquinasa y se interrumpe la glucólisis para no producir más ATP
 La hexoquinasa
Es inhibida por el producto de la reacción, la G-6-P y activada por Pi. La isoenzima de la hexoquinasa en hígado se llama glucoquinasa y tiene menor afinidad por la glucosa que la HK, luego tendrá una KM más alta.
La fosfofructoquinasa 1 (PFK1) Es la enzima clave en el control de la glucolisis; es una enzima alostérica y está regulada por metabolitos activadores (F-2,6-BP, AMP) y otros inhibidores (ATP, citrato, H+ ).
La Piruvato quinasa
 Es inhibida por el ATP, ALA, Acetil-CoA y los ácidos grasos de cadena larga. Los últimos pueden proporcionar ATP a través del Ciclo de Krebs. Es activada por F1,6-BP. En hígado es inhibida por fosforilación. Metabolismo de Fructosa-2,6-bisfosfato

FUNCIÓN REGULADORA DE FRUCTOSA-2,6-BISFOSFATO:

La fructosa-2,6-bisfosfato es un activador alostérico de la PFK1, el que la activa más potentemente. La fructosa-2,6-bisfosfato se forma desde la fructosa-6-fosfato en reacción catalizada por la fosfofructoquinasa 2 (PFK2). La F-2,6-BP es activador alostérico de la PFK-1, siempre que exista AMP. Es decir, para anular la inhibición del ATP, el AMP y la F2,6-BP deben estar presentes. La fructosa-2,6-bis-P impide que el flujo glicolítico se detenga cuando haya ciertos niveles de ATP en la célula. La PFK2 es una actividad que radica en una proteina bifuncional (proteína con dos funciones enzimáticas) junto con la actividad F-2,6-Bisfosfatasa, por tanto puede catalizar la síntesis y la degradación de la F-2,6-BP, según esté fosforilada o sin fosforilar. Estos razonamientos se completarán en el estudio de la gluconeogénesis
 Incorporación de otros glúcidos a la glucolisis o Rutas alimentadoras de la glucolisis Polisacáridos (Glucógeno, almidón).- El primero se degrada por la vía de la glucogenolisis hasta unidades de glucosa-1-P, que se incorporan a la fase preparatoria de la glucolisis para su degradación.
Disacáridos (disacaridasas).- Su hidrólisis produce monosacáridos que se incorporan a la glucolisis por diferentes vías Sacarosa + H2O -------------> fructosa + glucosa sacarasa Lactosa + H2O --------------> galactosa + glucosa lactasa Maltosa + H2O --------------> 2 glucosa maltasa.

 GLUCONEOGÉNESIS LAS REACCIONES ALTERNATIVAS

 Para evitar los pasos irreversibles que se originan en la glucólisis. la gluconeogénesis utiliza una serie de reacciones alternativas catalizadas por enzima:. Diferentes. En la figura se muestra un esquema de la ruta gluconeogenica, enfrentada a la ruta glucolitica. Los tres pasos irreversibles de la glucólisis se solventan a través de las siguientes reacciona, que son termodinámicamente favorables:
1. Síntesis de fosfoenolpiruvato: la conversión del piruvato en fosfoenolpi-ruvato requiere dos reacciona catalizadas por sendas enzimas: la piruvato carboxilasa, que canina la conversión de piruvato en oxalacetann y la fosfoenolpiruvato carboxiquinasa que cataliza la conversión del oxalacetato en fosfoenolpiruvato. La primen enzima, la Piruvato  carboxilasa, requiere el gasto de una molécula de ATP para fijar un nuevo átomo de carbono, procedente del CO, para generar oxalacetato, proceso que exige biorina como cofactor enzimitico. La conversión de una molécula de tres carbonos en otra de cuatro ocurre en la mitocondria. Posteriormente la hidrólisis del GTP impulsa la transformación del ~lacean, en fos-foenolpiruvato y CO2. gracias a la fosfoenolpiruvato carboxiquinasa, en-zima que puede actuar canco en la mitocondria como en el citoplasma celular dependiendo de la especie. Posteriormente, el fosfoenolpiruvato se convertirá en fructosa-1.6-bifosfato siguiendo, en sentido contrario, las reacciones reversibles de la glucólisis, ya descritas. 2. Conversión de la fructosa, 6-bifosfato en fructosa-6•fosfato: ésta es una reacción hidrolítica por la cual se elimina el grupo fosfato en posición 1 de la fructosa por acción de la enzima fructosa-1,6-bifosfatasa. En esta reacción no se regenera ATP si no que se obtiene P. La fructosa-6-fosfato se convertirá en glucosa-6-fosfato por la reacción reversible detallada en el apartado de la glucólisis.

Regulación de la gluconeogénesis
Es la síntesis de glucosa a partir de precursores no carbohidratos, es decir, síntesis de azúcares a partir de no azúcares. Los principales precursores son lactato, aminoácidos, oxalacetato y glicerol.
No se puede formar glucosa a partir de ácidos grasos porque se convierten en Acetil-CoA y los carbonos se pierden en forma de CO2.
Ocurre en animales, plantas, hongos y microorganismos; es una ruta universal. La gluconeogénesis es la principal fuente de glucosa en ayuno para evitar un shock hipoglucémico. En humanos esta ruta tiene lugar mayoritariamente en el hígado pero también en los riñones. Comparte reacciones con la glucólisis con la excepción de las catalizadas por HK, PFK y PK (reacciones de no equilibrio). Como todo proceso anabólico requiere un aporte de energía.

Reacciones de la gluconeogénesis.

 Conversión de piruvato en fosfoenolpiruvato: piruvato carboxilasa & PEPCK
Necesitamos dos enzimas para pasar de piruvato a fosfoenolpiruvato (2 de las reacciones anapleróticas que reponen los intermediarios del ciclo de Krebs), estas dos reacciones son exergónicas:
̶  Fosfoenolpiruvatocarboxilasa (necesita biotina). Ocurre en la mitocondria.
 ̶  Fosfoenolpiruvatocarboxiquinasa (PEPCK). Ocurre en el citosol.
 ¡RECUERDA! Para formar glucosa me hacen falta 2 piruvatos.
> Rutas alternativas desde el piruvato a fosfoenolpiruvato.
En función del precursor gluconeogénico (lactato o piruvato) predomina una ruta u otra. La importancia de las rutas está determinada por la disponibilidad de lactato y las necesidades citosólicas de NADH en la gluconeogénesis.
El PEP sale de la mitocondria a través de transportadores.
> Balance de la conversión de piruvato en PEP:
Piruvato  +  ATP  +  GTP  "  PEP  +  ADP  +  GDP  +  Pi
Conversión de fructosa 1,6-bifosfato en fructosa 6P: fructosa bifosfatasa
La FBPasa-1 promueve la hidrólisis prácticamente irreversible del fosfato en C-1, en estos casos no la transferencia de grupo fosforilo al ADP.
Fructosa 1,6-bifosfato + H2O " fructosa 6P + Pi
Conversión de glucosa 6P en glucosa: glucosa 6-fosfatasa
Se necesitan 5 proteínas para transformar la G6P citosólica en glucosa libre. Varias proteínas del RE (retículo endoplasmático) juegan su papel en la generación de glucosa; T1 transporta la G6P al lumen del RE, mientras que T2 y T3 transportan Pi y glucosa de vuelta al citoplasma. La G6P se estabiliza gracias a una proteína que une Ca2+.

 Balance de la gluconeogénesis.

2Piruvato + 2ATP + 2CO2 + 2GTP + 2H2O + 2ATP + 2NADH + 2H+ + 2H2O
Glucosa + 2ADP + 2Pi + 2GDP + 2CO2 + 2ADP + 2Pi + 2NAD+ + 2Pi
2Piruvato + 4ATP + 2GTP + 4H2O + 2NADH + 2H+ " Glucosa + 4ADP +  2GDP + 6Pi + 2NAD+
La gluconeogénesis no es el proceso inverso de la glucólisis ya que la célula tiene que gastar 6 enlaces fosfato ricos en energía, por lo tanto es caro energéticamente fabricar glucosa a partir de compuestos no carbohidratados.
En los seres humanos los órganos gluconeogénicos son el hígado y los riñones. Las células inmunes producen lactato, aspartato y glutamato que van al hígado para la gluconeogénesis. También interviene el tejido adiposo que produce glicerol mediante degradación de grasas.

 Gluconeogénesis desde glicerol:

El glicerol proviene de la hidrólisis de triacilglicéridos de los adipocitos que llegan al hígado dónde se transforma en glucosa mediante la siguiente vía:
Gluconeogénesis desde alanina y otros aa:
Sistema de transporte del nitrógeno desde el músculo hasta el hígado. La alanina proviene de la transaminación del piruvato con glutamato lo que forma alanina y α-cetoglutarato. Cuando la alanina llega al hígado participa en una reacción semejante pero en sentido contrario produciendo piruvato y glutamato. El piruvato ya puede entrar en la ruta gluconeogénica
Durante un sprint las células musculares transforman el glucógeno en glucosa y la consumen inmediatamente, produciendo piruvato y lactato (porque no hay O2 suficiente). El lactato también va al hígado dónde se transforma en piruvato para transformarse en glucosa como la hace el glicerol, glucógeno y aa.
El músculo cardiaco necesita un aporte continuo de glucosa y la consume siempre en condiciones aerobias.

DESTINO DEL PIRUVATO EN CONDICIONES ANAERÓBICAS: FERMENTACIONES


En ausencia de O2, y en algunas células, el piruvato se metaboliza hacia compuestos más reducidos para recuperar el NAD+, necesario para que siga actuando la vía glucolíticas; manteniendo así constante la relación NAD+/NADH citoplasmática.

FERMENTACIÓN LÁCTICA       

La fermentación es la degradación de glucosa en ausencia de oxígeno; comprende las reacciones glucolíticas y otras reacciones de reducción finales. Algunos microorganismos y las células musculares, en anaerobiosis, reducen el piruvato a lactato. Así pueden regenerar el NAD+ necesario para continuar la glucolisis.

FERMENTACIÓN ALCOHÓLICA

Los microorganismos fermentativos transforman el piruvato hasta etanol, en dos reacciones: descarboxilación y reducción. Ésta última permite a las células recuperar el NAD+ necesario para la glucolisis.



DESTINO AERÓBICO DEL PIRUVATO: DESCARBOXILACIÓN OXIDATIVA

Las células que metabolizan en condiciones aeróbicas no necesitan reducir el NADH para poder continuar la glucolisis, puesto que este coenzima reducido, NADH, descarga los e- en la cadena respiratoria mitocondrial y en consecuencia, las células pueden disponer fácilmente de NAD+ para continuar la glucolisis. En estas condiciones, el piruvato entra en las mitocondrias, donde se descarboxila y oxida hasta Acetil-CoA. La reacción la cataliza el complejo enzimático llamado piruvato deshidrogenasa (PDH).


COMPLEJO DE LA PIRUVATO DESHIDROGENASA

Está formado por tres actividades enzimáticas y su actuación necesita de cinco cofactores.

REGULACIÓN

La actividad de la PDH está regulada alostéricamente por varios metabolitos, como se aprecia en la siguiente figura. Los metabolitos que indican alta energía celular la inhiben y el AMP la activa.
Además, en células eucarióticas, la PDH esta regulada por fosforilacion / defosforilacion en respuesta a la acción hormonal. La enzima E1 se inactiva por fosforilación en un resto de SER.



RUTAS DE LAS PENTOSAS FOSFATO

La ruta de las pentosas fosfato, del fosfogluconato o de las hexosas fosfato ocurre en el citoplasma. Es fuente de NADPH y ribosa5P para biosíntesis de ácidos nucleicos. Tiene una fase oxidativa (generación de NADPH) y otra no oxidativa (interconversión no oxidativa de azúcares).
Fase oxidativa de la RPF.
Se pasa de una hexosa a una pentosa. Consiste en dos oxidaciones que convierten la glucosa 6P en ribulosa 5P y reducen el NADP+ a NADPH.
þ La principal y primera enzima es la G6PDH o G6PD (glucosa 6P deshidrogenasa).
þ La segunda enzima es la fosfoglucolactonasa  que forma el 6-fosfogluconato que es un metabolito exclusivo de esta ruta y por eso da nombre a la misma.
þ La tercera enzima y última de esta fase es la 6-fosfogluconato deshidrogenasa  que forma la ribulosa5P.
 > Balance de la fase oxidativa.
Glucosa6P + 2NADP+ + H2O " Ribulosa5P + 2NADPH + 2H+ + CO2
> Fase no oxidativa.
Comprende pasos que convierten pentosas fosfato en glucosa6P, la cual inicia el ciclo de nuevo. En esta rama existen 4 tipos de reacciones:
Ü  Fosfopentosa isomerasa: convierte una cetosa (ribulosa) en aldosa (ribosa).
Ü  Fosfopentosa epimerasa: epimeriza[1] el C3 (convierte ribulosa en xilulosa).
Ü  Transaldolasa: transfiere unidades de 3C.
Ü  Transcetolasa: transfiere unidades de 2C.
En esta fase se utilizan 3 ribulosas5P para formar 2 fructosas6P y un gliceroaldehido3P.
Todas las reacciones de la rama no oxidativa pueden ocurrir en sentido contrario ya que son próximas al equilibrio.
> Balance de la fase no oxidativa.
3Ribulosa5P (3x5C" 2Fructosa6P (2x6C) + gliceroaldehido3P (3C)
> Balance global.
3Glucosa6P + 6NADP+ + 3H2O " 3Ribulosa5P + 6NADPH + 6H+ + 3CO2

> Relación de la ruta PPP con otros procesos metabólicos.
 Procesos que requieren NADPH:
· Síntesis
· Detoxificación
> Regulación de la ruta PPP.
La entrada de glucosa6P en la ruta de las pentosas fosfato (RPF) es controlada por la concentración celular de NADPH que es un fuerte inhibidor de la G6PDH. Como el NADPH es utilizado en varias rutas metabólicas la inhibición se suaviza y la enzima se acelera para producir más NADPH.
La síntesis de G6PDH se induce por el incremento de la ratio insulina/glucagón después de una comida con alto contenido en carbohidratos. Esto es fundamental para la síntesis de ácidos grasos

METABOLISMO DEL GLUCÓGENO

El glucógeno es un polisacárido de origen animal, formado por una gran cantidad de moléculas de glucosa presenta una estructura ramificada. La función de este polisacárido es constituir un reservorio de moléculas de glucosa con la finalidad de cubrir la necesidad a corto plazo de este monosacárido; por lo tanto el glucógeno sirve como una reserva de energía a corto plazo. Aunque todas las células pueden tener glucógeno, este principalmente se forma en dos tejidos: el musculo y el hígado. El tejido muscular va a utilizar las reservas de glucógeno para cubrir las necesidades propias de este tejido, especialmente en los momentos de un ejercicio intenso, mientras que el hígado almacena el glucógeno con la finalidad de mantener los niveles de glucosa en sangre; en este sentido, el hígado también se ayuda de la gluconeogénesis para sintetizar glucosa y mantener los niveles de sangre.
Mantener los niveles de glucosa dentro de unos límites aceptables es importante, ya que es la glucosa disponible en sangre la que utiliza la mayoría de los tejidos para obtener la energía que necesitan en circunstancias normales. Los niveles de glucosa en sangre son cruciales para una serie de células (entre las cuales se encuentran los eritrocitos) que obtienen toda su energía de esta glucosa circulante, puesto que no pueden aprovechar otras fuentes de energía como pudieran ser los ácidos grasos y los cuerpos cetónicos. Las células cerebrales también dependen en gran medida de la glucosa en sangre, aunque estas si pueden adaptarse y obtener energía de los cuerpos cetónicos.
El metabolismo del glucógeno se puede dividir en dos procesos: la glucogenogénesis o
 síntesis de glucógeno y la glucogenolisis o degradación del glucógeno. Estos son dos procesos opuestos: el primero es anabólico mientras que el segundo es catabólico.
GLUCOGENOGÉNESIS
La síntesis de glucógeno se produce normalmente después de la ingestión, sobre todo si la dieta es rica en carbohidratos, pues en esos momentos habrá una gran cantidad de glucosa en sangre precedente de la dieta. Esta glucosa será almacenada tanto en el tejido muscular como el tejido hepático en forma de glucógeno. El tejido hepático será el que se encargue de acumular la mayor cantidad de glucosa en forma de glucógeno, debido a
 la presencia de la glucoquinasa, enzima que permite almacenar gran cantidad de glucosa en la célula en forma de glucosa-6-fosfato. Al contrario que la hexoquinasa presente en los demás tejidos, esta enzima hepática no se inhibe por la glucosa-6-fosfato, lo cual permite introducir una mayor cantidad de glucosa dentro de las células.
La glucogenogénesis comienza con la transformación de la glucosa-6-fosfato en glucosa-1-fosfato por acción de la fosfoglucomutasa, a través de una reacción reversible. Posteriormente se va a trasformar en UDP-glucosa. La activación de monosacáridos con UPT es un mecanismo habitual en las células. Esta activación determina que el monosacárido sea aprovechado para la formación de ósidos, ya que la formación del enlace o-glucosidico es un proceso endergónico que necesita energía aportada por la hidrolisis del UDP del monosacáridos
 Para la síntesis de glucógeno a partir de moléculas de UDP-glucosa, se necesitan:
Ÿ Una molécula preexistente del glucógeno o un cebador como la glucogenina.
Ÿ La enzima glucógeno sintasa, cuyo papel será alargar las cadenas lineales del glucógeno   mediante la adicción de moléculas de glucosa precedentes de la UDP-glucosa, uniéndolas mediante la adición de moléculas de glucosa procedentes de la UDP-glucosa, uniéndolas mediante enlaces o-glucosídico (α 1 → 4) con la cadena preexistente del glucógeno.
Ÿ La enzima ramificante, cuyo papel es crear los puntos de ramificación mediante enlaces (α 1 → 6). Esta enzima tiene una actividad glucosil transferasa, que transfiere parte de la cadena de moléculas de glucosa en enlaces α 1 → 4, uniéndola al glucógeno a través de un enlace α 1 → 6. (Feduchi Elena, 2010)
CONCLUSIÓN
Finalizando nuestro informe podemos destacar la importancia de incluir a los hidratos de carbono en nuestra dieta humana. Los hidratos de carbono son los componentes de la dieta que menos cantidad de calorías aportan por unidad de peso –alrededor de 4 Kcal. /g–. Mientras que esta relación en el alcohol es de 7 Kcal. /g. Los carbohidratos deberían representar el 50% de nuestro aporte energético diario, y las grasas no deberían superar el 30. Los carbohidratos (hidratos de carbono) nos engordan con más facilidad
Cuando los niveles de glucosa en la sangre aumentan, el páncreas estimula la producción de la hormona insulina, la cual se encarga de guardar la glucosa en las despensas. Sin embargo, ésta no es su única misión: a la vez que guarda, también se asegura que la grasa guardada no se queme. Por esta razón, y aunque la insulina es muy importante para mantenernos vivos, hay que evitar producir grandes cantidades. Sin duda, la forma más efectiva de controlar los niveles de insulina es a través de comer alimentos con un bajo índice glicémico. Recordemos que a mayor índice glicémico, mayor producción de insulina
. Además, los primeros tienen un efecto más saciante que las grasas
Aquellas personas que desean adelgazar, deberían procurar sustituir el consumo de grasas por hidratos de carbono, lo que supondría una mejora en su dieta y permite perder peso a largo plazo.
La mayoría de las personas identificamos los hidratos de carbono con los alimentos ricos en energía y quienes se preocupan por su peso, además procuran esquivarlos a la hora de diseñar su dieta. Las verduras, las carnes y los pescados son los alimentos más indicados para evitar los carbohidratos.
Tan importante como incluir en nuestra dieta carbohidratos es tomar proteínas, presentes en carne, pescado, huevos y frutos secos. La proporción de alimentos ricos en carbohidratos, que se recomienda comer, debe ser el doble que la correspondiente a alimentos con proteínas.


Bibliografía

• Mathews van Holde. Bioquímica, E. M.–I. (2015). metabolismo hidrato de carbono. Editorial Omega. Ediciones varias.
Bioquímica, P. (. (2015). Metabolismo de hidratos de carbono. PORTOVIEJO: Editorial Limusa.
Bioquímica., P. (. (2015). Portoviejo : Editorial Limusa.
Feduchi Elena, B. I. (2010). Bioquímica. Conceptos esenciales. Madrid: Ed. Médica Panamericana.
Feduchi, B. R. (2015). metabolismoo de hidrato de carbono . Bioquímica Conceptos.